———- Mensaje reenviado ———-
De: Raúl
Fecha: 23 de febrero de 2016, 11:39 Asunto:
Agradecimientos de Patricia y Raúl.
Para: Eva Boda <info@haciendadelalamo.es>
Hola Eva.
Como queríamos agradeceros a todos, empezando por ti y todo tu equipo, pasando por las personas que nos recomendaste así como a nuestro modisto, fotógrafo y en general a todo el mundo que de alguna u otra forma participó en la celebración de nuestra boda, hemos redactado una carta de agradecimiento en la que os nombramos a todos y que adjunta a este correo os enviamos.
Nunca te olvidaremos y siempre recordaremos con gran cariño el magnífico día que entre todos nos hicisteis pasar. No sólo fuisteis las personas que contratamos para organizar nuestra boda, sino que erais unos amigos más compartiendo nuestra alegría.
Recibid todos un grandísimo abrazo,
Patricia y Raúl.
Érase una vez, en un lugar muy muy lejano, llamado Hacienda del Álamo.
Desde el momento en que decidimos casarnos tuvimos clarísimo que nuestra boda tenía que ser como vivir un cuento de hadas. Patricia sería Blancanieves y Raúl su Príncipe Azul. Eso era lo único que teníamos claro, así que, una vez decidido nos pusimos manos a la obra.
Al principio todo fue una locura… ¡no sabíamos por dónde empezar! Miramos infinidad de sitios para tratar de encontrar el lugar idóneo en el que hacer nuestro sueño realidad, pero ninguno de ellos nos parecía el adecuado ¡queríamos que fuera perfecto! Un día, ya al borde de la desesperación (el tiempo se nos echaba encima) dimos con la Hacienda del Álamo, así que llamamos y concertamos una cita. Hasta que por fin nos conocimos, en nuestra cabeza rondaban muchas dudas: ¿sería tan bonito como nos lo pareció en fotos? ¿se prestarán a hacer una boda tan, cómo decirlo, fuera de lo normal?
Desde que pusimos un pie en la Hacienda nos enamoramos del lugar. Parecía un sitio mágico, perfecto para nuestro cuento de hadas. Enseguida vimos a Eva, que nos esperaba en la puerta principal de la casa. Nos recibió con los brazos abiertos y después de haber hablado con ella tan sólo unos minutos supimos que tenía que ser nuestra organizadora de la boda. Nos conquistó con su gran simpatía, amabilidad y espontaneidad, además del aire de gran profesional que derrochaba por los cuatro costados. Pero ¿qué pensará cuando le digamos que nuestra boda va a ser temática?, pensábamos mientras ella nos enseñaba lo maravillosos que son los jardines de la hacienda. Seguían los nervios… Cuando ya lo vimos todo, supimos que no habría otro lugar que fuera tan perfecto para nosotros.
Una vez que terminamos el tour por la finca pasamos a uno de los preciosos salones del interior de la casa para hablar de los detalles. Ahí fue cuando se lo soltamos: Eva, el sitio nos parece precioso y queremos celebrar aquí nuestra boda, pero tenemos que decirte una cosa: nuestra boda va a ser temática y queremos que sea el cuento de Blancanieves. Ya está, ¡soltamos la bomba! No podemos describir con palabras la transformación que sufrió la cara de Eva en ese momento. Parecía que iba a explotar de felicidad, porque según nos dijo ella posteriormente, le encantan todos los cuentos de Disney. En el mismísimo momento en que se lo dijimos nos respondió, gritando de alegría, que le encantaba la idea y también en ese mismo momento supimos que nuestra búsqueda había llegado a su fin.
A partir de tomar la decisión de celebrar nuestra boda temática en la Hacienda del Álamo y desde que Eva se puso a llevar las riendas del proyecto, todo fue sobre ruedas. Como alguien nos dijo una vez, “rodéate de los mejores y serás el mejor”. Pues así fue… Nuestra boda no pudo salir mejor. Podemos decir, una vez comprobados los resultados y sin temor a equivocarnos, que el equipo formado por todos los profesionales de Hacienda del Álamo es el mejor. También tenemos que decir que cuando se trataba de algo que ellos no gestionaban directamente, siempre supieron recomendarnos a grandes profesionales, como fue con el caso de la tarta, la decoración, el ramo de la novia, etc…
Fue una boda mágica celebrada en un lugar de cuento. Se casó Blancanieves con su Príncipe Azul y todos los seres animados de otros cuentos y los animalillos del bosque estuvieron presentes. Todo el equipo de la Hacienda estuvo magnífico e insuperable y para ellos van estas palabras de agradecimiento. Desde el director del evento, con Eva ¿o tendría que decir Anna (Frozen) o Bella durmiente? como su mano derecha, pasando por todos y cada uno de los camareros, que resultaron ser los enanitos de Blancanieves. Mención especial para ellos porque, con Alejandro, también conocido como Mudito, al frente, estuvieron fantásticos. Desde el primer momento se implicaron con nosotros e hicieron que este cuento fuera suyo también. Eso no les impidió hacer alarde de su gran profesionalidad a la hora de realizar su trabajo. Tenemos que decir que no podría haber habido otros mejores. El personal de cocina, magnífico también, ¡todo estaba riquísimo! Alex, nuestro DJ, estuvo impecable, resultando ser un gran profesional y demostrando tener más paciencia que un santo con las peticiones de los invitados. También queríamos dar las gracias a todo el personal cuya labor fue “invisible” porque sin ellos tampoco hubiera sido posible.
Agradecer también a los profesionales que Eva nos recomendó, como por ejemplo Peggy and co, nuestra decoradora, que no faltó a nuestra cita y vino personalmente ella a pesar de haber sufrido un pequeño accidente el día anterior. Ella y su equipo hicieron un grandísimo trabajo con la decoración, haciendo que no faltara un solo detalle, transportándonos directamente al cuento que queríamos vivir. Nuestra “Fruistera” Marta Pino, que nos hizo una tarta tan preciosa como deliciosa. A la floristería la Buganvilla, por saber plasmar en el ramo de la novia toda la esencia de las flores del bosque en el que vivía Blancanieves.
Como Blancanieves tenía que estar preciosa el día de su boda, conseguimos a la persona perfecta para lograrlo. Juan, de HAUS of ZANNY, el modisto que hizo su vestido y la maquilló. También vistió al Príncipe Azul y al Hada Madrina. Muchas gracias Juan, por tu excelente trabajo y por ser como eres, una gran persona y aún mejor profesional.
En una boda de cuento no podía faltar el mejor fotógrafo, Fran Russo, quien con sus preciosas fotografías ha sabido plasmar completamente la magia que nos rodeaba en todo momento. Un millón de gracias, Fran, por inmortalizar para siempre este gran momento de nuestras vidas.
También queríamos agradecer enormemente a nuestros invitados que se hayan prestado a semejante locura, por su implicación y participación, metiéndose en todo momento en el papel de sus personajes y haciendo alarde de la simpatía que los caracteriza.
Gracias a todas y cada una de las personas que estuvieron presentes, por uno u otro motivo. Todos formasteis parte de nuestra gran historia y eso no lo olvidaremos nunca.
Y colorín colorado, este cuento sólo ha empezado.
Con todo nuestro cariño,
Patricia y Raúl.
